Disponer de una impresora tanto en casa como en el trabajo nos ayuda a simplificar muchas tareas en el día a día. Pero no todas las impresoras se adaptan a lo que necesitamos en cada momento. Según el uso que le vayamos a dar, nos centraremos en unas características concretas.
Ahora bien, el mercado ofrece un amplio abanico de opciones, lo que hace que encontrar la impresora que mejor se adapte a tus necesidades se pueda volver una tarea tediosa. En este post analizaremos las distintas opciones que podemos elegir.
¿Cómo identificar las necesidades de impresión?
La primera pregunta que deberíamos hacernos es el uso que le vamos a dar a la impresora: cuánto vamos a imprimir, con qué frecuencia, en qué colores y formatos, y qué funcionalidades extra necesitaremos.
Lo más importante es tener una orientación del número de páginas que se imprimirán al mes, y si éstas serán en blanco y negro o a color. Seguramente, para una empresa se requieran más copias en el día a día, pero pueda servir con una impresión en blanco y negro. Si por ejemplo, el uso de la impresora es académico, es muy posible que se imprima con menos frecuencia, pero que se necesiten imágenes y gráficos a color.
Tenemos que tener en cuenta también el formato de papel en el que queramos imprimir, aunque lo más común es imprimir en A4. También es posible que queramos algún tipo de papel en especial, y no todos los tipos de impresoras admiten las mismas calidades de papel.
Puede que, aparte de imprimir, queramos algunas funciones extra, como pueden ser escáner y fotocopiadora, o incluso fax. Existen modelos de impresora multifunción que incluyen estas funcionalidades, todo incluido en el mismo aparato.
¿Cómo elegir la mejor impresora?
Estos son los distintos aspectos a tener en cuenta para identificar cuál es el mejor modelo de impresora que debemos comprar:
La conectividad
Una impresora puede conectarse a un dispositivo como un ordenador a través de cable o WiFi. El cable limita las posibilidades de uso, así como la distancia de la impresora al ordenador. En cambio, si conectamos la impresora mediante WiFi, podremos colocarla a una mayor distancia, hasta donde la red WiFi nos permita. Aparte, disfrutaremos de ventajas extra como conexión directa desde la nube o el correo electrónico.
Los costes de impresión
Estos se definirán según el tipo de impresora: de inyección de tinta o láser; la frecuencia y cantidad de impresiones, el color, el tipo de cartucho o tóner a utilizar o la calidad de impresión. En cuanto a todo esto, debemos tener una planificación previa del uso que le vayamos a dar.
Podremos elegir la impresora en función del precio de los consumibles que utilice, si permite impresión a color, o si tiene la posibilidad de incluir cartuchos XL.
El tamaño de la impresora
Según el espacio del que dispongamos, las dimensiones y ubicación de la impresora serán factores importantes a tener en cuenta. No es lo mismo tener una impresora compartida por varias personas en un centro de trabajo, que tener una en casa junto al ordenador.
En el mercado podemos encontrar algunas impresoras con un gran tamaño, pero también existen modelos más compactos con prestaciones algo reducidas.
Las funcionalidades
Que la impresora incluya escáner, fax o fotocopiadora puede ser un importante requerimiento a la hora de elegir una impresora. Dependerá de si realmente necesitamos o no estas funcionalidades. Hay que tener en cuenta que las impresoras que cuentas con estos extras, tienen unas mayores dimensiones.
Una vez tengas la impresora que más se adapta a tus requisitos, deberás instalar adecuadamente los drivers para asegurar un correcto funcionamiento. Estos se pueden descargar desde nuestra web pindrivers.com, un sitio en el que encontrarás todos los controladores que puedas necesitar.